- Impone el seguro de viaje en el precio final del boleto.
- Dicha práctica comercial es ilegal en la aviación a nivel mundial
- Engaño cibernético del que son objeto los viajeros
Por Guillermo Pimentel Balderas
Mientras no haya una orden judicial, Aeroméxico seguirá abusando lo más que pueda de los consumidores mientras siga aplicando en su plataforma de venta de boletos en línea el cargo automático de un seguro de viaje que aparece en el precio final del boleto, sin que el consumidor previamente lo haya solicitado.
Esto, lo considera la Procuraduría Federal del Consumidor como un engaño cibernético del que son objeto los consumidores debido a que dicha práctica comercial ha sido eliminada del mercado de la aviación a nivel mundial, o sea, es una estafa.
Advierte Profeco que a pesar de que Aeroméxico sabe que todo lo que obtenga, a partir de ahora –en esta forma- tendrán que acabar devolviéndolo. Por ello, exhorta a esta línea de aviación comercial a eliminar de su plataforma de venta de boletos en línea el cargo automático de un seguro de viaje que aparece en el precio final del boleto, sin que el consumidor previamente lo haya solicitado.
Lamenta la dependencia que la aerolínea ha sido omisa en atender una medida precautoria para eliminar ese cargo, que esta la aplica. “En la Unión Europea y en Estados Unidos se determinó que esa práctica era ilegal; recordó que en el viejo continente hubo líneas aéreas que tuvieron que devolver dos o tres años del cobro de ese seguro a sus clientes, mientras que en nuestro vecino del norte se enmendó el problema de inmediato, por lo que no hubo requerimiento para indemnizar a los consumidores”, indica por medio de un boletín de prensa.
Cabe señalar que muchos pasajeros no necesitan el seguro o no lo quieren, y terminan comprándolo por el engaño cibernético del que son objeto por Aeroméxico. En vuelos nacionales el cargo por seguro de viaje es de $359.00 pesos, y en vuelos internacionales de $416.00.
Estos cobros los realiza Aeroméxico a través de un proceso opt-out, en que el extra aparece cargado sin el consentimiento del consumidor, constituyéndose en una práctica abusiva. Es distinto cuando se da al comprador la opción de elegir o no un extra, a través de un proceso de opt-in que consiste en solicitar el consentimiento previo y voluntario, concedido de forma expresa marcando una casilla.
“Aeroméxico, sí o sí, tiene que quitar el opt-out, como lo quitaron todas las líneas aéreas en el mundo”, afirma la Profeco, al considerar que pareciera ser que la determinación de esta aerolínea es de que, mientras no haya una orden judicial, “sigamos abusando lo más que podamos”. Sin embargo la Institución federal advirtió que agotará todos los mecanismos e instancias legales disponibles para frenar este abuso a los consumidores.