Por Tomás Rojas Madrid
Los bomberos de la Ciudad de México protagonizaron uno de los eventos más impactantes ocurridos en el presente Siglo en la capital del país, al lograr el rescate de 29 trabajadores del Sistema de Transporte Metro, atrapados en un edificio envuelto en llamas.
Se trataba del edificio desde donde se controla el trafico de los trenes que conforman la red del metro que atraviesan la ciudad.
Los trabajadores quedaron atrapados en los pisos cuatro, cinco y seis, que quedaron envueltos en sofocante y venenoso humo producto de las llamas que salían del sistema eléctrico que se estaba quemando en la planta baja del edificio.
Utilizando escaleras telescópicas, los bomberos fueron rescatando uno a uno a los trabajadores, pero la desesperación llegó, y una mujer policía prefirió la muerte y se arrojó al vacío desde el quinto piso.
Al menos seis líneas del Metro de la Ciudad de Mëxico suspendieron su servicio, debido a que el Puesto de Control comenzó a incendiarse, y los trabajadores huyeron para salvar sus vidas.
El mencionado puesto de control, se convirtiò de un momento a otro en una gigantesca antorcha, presagiando que algo grave estaba pasando en esta capital pues el fuego se vio desde cualquier punto de la ciudad se podían ver las llamas.
De inmediato, una cuadrilla de bomberos llegó a la zona del siniestro, ubicada en la calle Delicias, parte trasera de la estación Salto del Agua del Metro.
En cuestión de minutos, la zona se trasformó por el gran movimiento de ambulancias, carros de bomberos, y gritos de más de cincuenta personas que estaban atrapadas en el edificio de seis nivéles.
Faltaban diez minutos para las seis de la mañana cuando se declaró la alerta por este incendio.
Fue espantoso lo que vivieron los trabajadores atrapados por el humo. Una mujer policía se arrojó desde el quinto piso al ver que las llamas la rodeaban.
Un helicóptero sobrevoló la zona.
Los bomberos desplegaron una escala para rescatar a los trabajadores atrapados, en tanto otros combatían las llamas.
Al mismo tiempo, las líneas 1, 2, 3, 4, 5 y 6, estaban paralizadas, la gente abarrotaba los andenes, no sabían lo que estaba pasando en superficie, se estaba quemando el edificio sede del Metro.