Por Guillermo Pimentel Balderas
IPN, ¿un légamo?
El Instituto Politécnico Nacional (IPN), atraviesa por un fango, con enfrentamientos dentro y fuera por el control de la Dirección General a cargo (todavía) de Arturo Reyes Sandoval, quien se encuentra en una tablita. A pesar de que el nombramiento de Reyes Sandoval se dio en Palacio Nacional, con la presencia de López Obrador, en una de las “mañaneras”, se pensó que traía la “bendición” presidencial. Sin embargo, al parecer, no bastan para seguir al frente de una de las instituciones educativas más importantes del país. Pero, todo parece indicar que en este México, se trabaja más por los intereses personales que por los de la nación y, tanto dentro como fuera del IPN, se trata de desquiciar su vida académica y de paso tirar al Director General. Dicen que Joel Ortega, empujado por los “cerebros del pasado” con toda la intención de colocar directores afines, lleva como propósito expandir sus planes de negocios, contando en este proceso con el beneplácito del actual director de la CFE, Manuel Bartlett Díaz. ¿Sera? Pero Sandoval, dicen, no conoce las entrañas del Politécnico y que por eso el malestar de muchos académicos y trabajadores. Es un extraño en la Institución, se pregona. De acuerdo a un análisis que publico CCO Noticias “Corporación Comunicativa Ojeda” (https://cconoticias.com/) tomado de la revista huellas de México, https://huellas.mx/), se da a conocer que en enero de 2022, el actual encargado del Politécnico se enfrenta a duros cuestionamientos por parte de este grupo de políticos que encabeza Joel Ortega. Es decir, fuera, la grilla la empuja el ex secretario de seguridad pública del Distrito Federal con Marcelo Ebrard y con Miguel Mancera, egresado de la ESIME, quien en 2000 hizo campaña junto con Andrés Manuel López Obrador para jefe delegacional en Gustavo A. Madero, para el período 2000-2003. Este personaje que ha sobrevivido políticamente por el arte del trapecio, es quien, dicen, está obsesionado por ocupar la titularidad del IPN; pero, la comunidad politécnica no lo acepta por su negro historial como “Jefe” de la policía capitalina. Se narra en el trabajo periodístico que, adentro del Poli, como cabeza de este intento de desestabilización, figura el Secretario General, Juan Manuel Cantú Vázquez, cercano a la ex directora Yoloxóchitl Bustamante, quien permanece incrustado en esta área más que estratégica para la toma de decisiones y desde donde perfila sus planes para asumir el control y manejo de la institución. Se asegura que cuenta con el apoyo y “experiencia” de Raúl Talán, el mismísimo Joel Ortega (quien ocuparía después la titularidad), Alejandro Garduño, Ricardo Octavio Mota Palomino y Sergio Viñals, entre otros, identificados como un grupo de “cerebros del pasado. Mientras tanto, el colectivo Justicia Transversal Mexicano (JTM) del abogado Mauricio Santiago Eder, no cesa en sus cuestionamientos en contra de la actual administración politécnica y señaló recientemente por medio de un boletín de prensa que “el director del Instituto Politécnico Nacional (IPN) deberá responder ante la Comisión de Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos (OEA) quien conoció de denuncias de corrupción, acoso sexual y violación a los Derechos Humanos. Dicen, que en un evento del presidente, éste se topó con Sandoval y lo saludo y felicitó por su trabajo en el Poli. Al parecer López Obrador no está enterado de lo que sucede en el IPN y le sigue teniendo confianza. ¡Ya veremos!
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