Por Gabriel Castillo García y Edgar Ríos F.
Parte Dos
Después de estas renuncias colectivas, “¿cuál sigue?”, se preguntan servidores públicos que laboran en dependencias federales.
Enero del 2022, resultó “negro” para Agentes del Ministerio Público Federal, Policías Ministeriales, Policías de la Agencia de Investigación Criminal, personal de la Coordinación de Peritos, así como de la SIEDO y del Área Metropolitana, tras haber sido renunciados cerca de dos mil 500 elementos de la Fiscalía General de la República, FGR, el día 28 de Diciembre del 2021.
Por otro lado, se puso de manifiesto que en estos primeros meses del año, serán dados de baja mil 300 elementos de seguridad de Petróleos Mexicanos; en ambos casos las plazas serán ocupadas por militares de la Secretaria de la Defensa Nacional y de la Guardia Nacional.
El ingeniero Manuel de Jesús Gómez Rojas, director general de Mandamientos Ministeriales y Judiciales de la Policía Federal Ministerial y de la Agencia de Investigación Criminal, la noche del 31 de Diciembre, envió un oficio a las 32 delegaciones regionales del país así como a las direcciones generales en la CDMX, donde señaló que quedaba prohibida la entrada a las instalaciones de todos los elementos renunciados.
Fue el 28 de Diciembre cuando los dos mil 500 servidores públicos fueron citados a las oficinas de la FGR, ubicadas en los Estados de México, Tlaxcala y Puebla, así como en la CDMX. Ahí, los hicieron firmar su renuncia y les entregaron un cheque correspondiente a un finiquito.
El hecho causó incertidumbre, zozobra, temor entre otros a que la “guillotina” los alcance y es momento en que los servidores públicos que no han recibido su citatorio para firmar su renuncia se encomiendan al “santo de su devoción”, sin embargo, se presume que en breve correrán la misma suerte.
HABREN PASO A LA SEDENA Y GN.
Entre los elementos renunciados se corrió la versión de que sus plazas serán ocupadas por militares de diferentes grados quienes se encargarán de realizar los trabajos de investigación, peritajes e integración de las mal llamadas carpetas de investigación.
El licenciado Rodolfo Martínez Destroza, defensor de los elementos renunciados, afirmó que las autoridades de la Fiscalía General de la República, FGR, que encabeza Alejandro Gertz Manero, cometieron flagrantes violaciones a la Ley laboral por lo que su despido fue injustificado y se encargará de ampararlos.
El motivo de la supuesta renuncia de tantos elementos de la Fiscalía General de la República, se debió a que las plazas serán “suprimidas” por razones presupuestales, es decir el recorte republicano presupuestal, anunciado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Además, también “salen sobrando”, ante la estructura del nuevo modelo que transita y que en breve se pondrá en funcionamiento dentro de la institución encargada de impartir justicia a los mexicanos a nivel nacional.
El litigante informó que de acuerdo a las versiones de los elementos renunciados, la aplicación de leyes y códigos penales federales, así como reglamentos, entre otros, quedaran en manos de militares y de la Guardia Nacional. Esta última hasta la fecha carece de representación jurídica para realizar operativos, detenciones y disolver manifestaciones, entre otras actividades en perjuicio de la población.
HABRA BAJAS EN PEMEX.
Se informó que la Subdirección de Salvaguarda Estratégica, SSE, de Petróleos Mexicanos, en breve dará de baja a mil 316 elementos que prestan servicios de seguridad. Sus plazas pasarán a manos de militares pertenecientes a la Secretaria de la Defensa y de la Guardia Nacional, esta última dirigida por el general Luis Rodríguez Bucio.
Los militares se encargarán de la seguridad y operatividad de las instalaciones de la paraestatal a nivel nacional, mediante convenios firmados con las autoridades de PEMEX.
CUAL SIGUE…
La incertidumbre entre servidores públicos de las dependencias federales o del Instituto Nacional Electoral, INE, “¿cuál es la que sigue?”, es decir donde se realizarán renuncias masivas o colectivas de servidores públicos o personal que labora en intendencia. Hay inquietud entre la clase trabajadora de las dependencias federales del país.
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