*** No resuelve el problema y sólo genera esperanzas con un objetivo clientelar y electoral
*** Sólo 30 de cada 100 trabajadores con cuenta individual, alcanzarían una pensión de retiro; cesantía en edad avanzada y vejez, y el monto sería equivalente al 17 por ciento de su último salario, alertó
Por Ignacio Arellano Mora
El Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), en la Cámara de Diputados, rechazó el dictamen sobre pensiones enviado por la Presidencia de la República a esta soberanía y que plantea, entre otras cosas, reducir de 1 mil 250, a 1 mil, el número de semanas de cotización requeridas para que el trabajador pueda utilizar las prestaciones de los seguros de cesantía en edad avanzada y vejez.
Igualmente, consideró ampliar el monto de la pensión garantizada a trabajadores que no tienen los recursos suficientes en su cuenta individual para alcanzar una asignación mayor.
A través de Antonio Ortega Martínez, el PRD denunció que la propuesta acordada entre Gobierno y empresariado, no cambia el modelo: “El Estado asume nuevamente los costos del fracaso de la capitalización individual y mantiene intacto el negocio del modelo privatizador a costa del sacrificio para las finanzas del país”.
“Disminuir el número de semanas de cotización del trabajador – explicó Ortega Martínez- se constituye en una enorme carga para las finanzas públicas pues tan solo este año, se destinaron un billón 200 mil millones de pesos de recursos públicos para atender el sistema pensionario, y se estima que para el 2024, el monto superará los dos billones de pesos”.
“No se cambia el modelo, y con esta reforma el Estado asume nuevamente los costos del fracaso de la capitalización individual manteniendo intacto el negocio para las empresas administradoras. Es la continuación del modelo privatizador, es hacerlo que persista en el tiempo, a costa del sacrificio fiscal que nos va a representar como país”, fustigó.
El perredista recriminó en este sentido, que se haya ofrecido un “diálogo nacional, amplio y abierto a la sociedad para construir una solución integral”; y en cambio, se nos recete un “rancio acuerdo de cúpula” entre empresarios y gobierno, con la agravante de que se traiciona a la palabra y se da un “madruguete” topando las comisiones de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores).
“Con este dictamen -prácticamente igual a la iniciativa del Ejecutivo Federal- se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de las leyes del Seguro Social y de los Sistemas de Ahorro para el Retiro; pero se incumple con la promesa de legislar ‘la gran reforma al sistema de pensiones’ cuando (el 29 de abril de 2019) fueron aprobadas modificaciones a la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro” bajo el argumento –recordó Ortega- de “ofrecer más opciones de inversión, lograr mayores rendimientos, menos comisiones, y que las utilidades se reflejen en las pensiones de los trabajadores cuando se retiren y fomentar el ahorro”.
De acuerdo con el también secretario de la Comisión de Hacienda, en este dictamen se presentan ajustes “de forma” sin atender las causas de las deficiencias estructurales del modelo y el diseño del sistema establecido desde 1997. “No se presentan nuevas alternativas para los sistemas de pensiones y las necesidades de los millones de trabajadores, formales e informales, que no cuentan con un retiro digno”.
El “modelo de la reforma neoliberal de 1997” que López Obrador tanto criticó porque “perjudica a los trabajadores” se conserva intocado, de manera que, así como está definido, solo el 30 por ciento de quienes tienen una cuenta individual, alcanzarán el beneficio de una pensión del seguro de retiro; cesantía en edad avanzada y vejez, con una pensión equivalente al 17 por ciento de su último salario; reprochó.
Precisó que, en el debate nacional, se han dado otras propuestas como las del ex titular del IMSS y ex subsecretario de Egresos de Hacienda, Santiago Levy, quien planteó la posibilidad de establecer una “pensión general” financiada a partir de la recaudación habitual de impuestos y a la cual tendrían derecho todos los trabajadores. Mientras que –en su caso- el destacado economista Isaac Katz, ha propuesto juntar el 5 por ciento de las aportaciones que las empresas hacen al Infonavit, y se acumulen a las cuentas de retiro, con lo cual se llevaría la tasa de reemplazo a alrededor de 70 por ciento. Con ello –aseguró- se lograrían pensiones mucho más decorosas.
El voto en contra del PRD añadió, obedece entonces a que este dictamen es ilusorio al presentar supuestas bondades de una iniciativa presidencial que solo abarcan a un reducido grupo de trabajadores, generando expectativas y esperanzas con un claro objetivo clientelar y electoral; pero es irresponsable y superficial, porque impone enormes cargas fiscales en los próximos años al Estado Mexicano.
“Solos contra el mundo. Y aunque las Afores se vistan de 4T, Afores se quedan; por eso el PRD votará en contra”, concretó.