Odio, saña, poder y justicia pisoteada, contra la familia Barrios: Alejandra Barrios.

Por Gabriel Castillo García y Ed Ríos.

Como una película o una telenovela del “Canal de las Estrellas”, extraída de la vida real, donde la saña y el poder prevalecen por encima de todo, y la justicia penal es pisoteada por los funcionarios en el poder, se desarrollan el encarcelamiento de la líder de comerciantes en vía pública, en el Centro Histórico, Alejandra Barrios Richard y su hija Diana Sánchez Barrios.

 Los jueces penales del fuero común, como es el caso de Júpiter López Ruíz, se convierten en serviles cumplidores de los funcionarios y aplican la Ley bajo las órdenes que reciben, con parcialidad.

Desde el interior del penal de Santa Martha Acatitla, en la alcaldía Iztapalapa, la líder de 78 años de edad, con padecimientos crónico degenerativos y secuelas de Covid-19 que no le permiten respirar de manera normal, clama “justicia”.

 Alejandra, quién -de acuerdo a sus familiares- no ha recibido tratamientos médicos para el combate de sus padecimientos, hizo un relato de como se desarrollo su comparecencia en el Juzgado de Control número 12, ubicado en la colonia Doctores.

El día de su comparecencia, el “impartidor de justicia”, en ningún momento la dejó hablar. Si en cambio permitió que el “policía” Martín Rebollar Aguilar, perteneciente a la Secretaría de Seguridad Ciudadana, SSC, la siguiera difamando.

 Deprimida y desmoralizada por la forma en que se aplica la justicia en la CDMX, la mujer exclamó: cuanto odio y coraje me tiene este gobierno local de la 4T. No le ha bastado tenerme privada de mi libertad por delitos fabricados que no cometí”.

“Ahora con dichos falsos como son los que me imputan el policía en activo Martín Rebollar Aguilar y su esposa Claudia Morales, van en contra de mi familia, pues los testigos protegidos, blindados por la Fiscalía General de Justicia de la CDMX, me acusan de haber sido agredidos por gente mía”.

PLEITO DE VENCIDAD DE LA FAMILIA MORALES. 

Triste y desmoralizada por el apoyo brindado por parte de René Bejarano y María de los Dolores Padierna Luna, al uniformado de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, SSC, Martín Rebollar, la líder hizo un relato del fondo real de los hechos.

Dijo que tanto René Bejarano, “político-delincuente” y su esposa María de los Dolores Padierna Luna, “política-delincuente”, protegidos con anterioridad por el PRD y ahora por MORENA, “escucharon la falsa versión de Martín Rebollar y esto fue suficiente para que ayudados por la Jefa de gobierno de la CDMX, integraran las mal llamadas carpetas de investigación por los delitos de robo y extorsión en pandilla.

Alejandra Barrios, relató el fondo real de lo que podría ser una telenovela “envuelta en el odio, rencor e injusticia”. Basó su versión en que al momento de realizarse la audiencia en el juzgado Júpiter López Ruíz, blindó a los “testigos y acusadores de Alejandra, como su tuviera temor de que llegara un comando armado a rescatarla, tipo el narco”.

Cando se originó el problema entre la familia Rebollo Morales, se debió a que yerno de ellos dejó a la esposa con una criatura -por motivos desconocidos- y esto motivó que un vástago de Claudia Morales fuera en busca del desobligado padre. En ese momento se enfrentaron a golpes y el reclamante perdió la batalla.

“Esa no fue mi culpa, dijo Alejandra Barrios, fue un pleito de familia y de vecindad. Ahora me lo están colgando a mi y a m hija, lo cual es injusto”.

JÚPITER LÓPEZ RUÍZ, MANIPULO LA COMPARECENCIA.

Debido a que el vocero de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX, Ulises Lara, dijo a la ciudadanía -en conferencia de prensa- que a Alejandra Barrios Richard, no “se le había otorgado el beneficio de la libertad provisional para seguir su juicio en casa, debido a su edad y salud por considerarse una mujer peligrosa”, exclamó lo anterior.

 “Durante la comparecencia los testigos blindados y apoyados, así como el juez de “línea”, se confabularon para crear un ambiente hostil en torno a mí, con el fin de desestabilizarme, de arrinconarme para presentarme como peligrosa”.

“Me piden pruebas de mi comportamiento en el juzgado”. “¡claro que las hay!”.

Y, sostuvo, “sólo basta pedir el video de mi comparecencia para darse cuenta de la manipulación que hace de mi caso el juez Júpiter López Ruíz”.

EL JUEZ NUCA ME HIZO CASO, NI ME ESCUCHO.

Indignada por la forma en que se desarrollaba a audiencia, Alejandra Barrios, dijo que “hubo la promesa de que me iba ha dejar hablar después del receso, pero no me lo permitió por lo que le “arrebate la palabra”.

“Esto fue, aclaró, en mi desesperación por hacerme escuchar y dejar en claro que nunca estuve en el lugar de los hechos que todo son mentiras”.

Además, el juez de “línea” no dejó entrar a la audiencia a mis testigos como es el caso de la terapeuta con la que domingo a domingo a que me aplique terapías para recuperarme de las secuelas que me dejó el Covid-19”.

CLAUDIA Y MARTIN, DELINCUENTES CON IMPUNIDAD

De acuerdo a la información que tiene en su poder la líder de comerciantes en vía pública del Centro Histórico, Alejandra Barrios Richard, Martín Rebollar Aguilar, cuenta con varias carpetas de investigación por delitos de robo, asalto, tortura, golpeador y violencia intrafamiliar.

Mientras que Claudia Morales, de acuerdo a personas cercanas a ella, -se parece a Dolores Padierna- invasora de predios, extorsiona y manda golpear a quien no obedezca sus lineamientos, entre otros delitos.

Concluyó Alejandra Barrios Richard, “¿qué calidad moral tienen para acusarme de delitos que no cometí?”.